Tuesday, December 08, 2015

CARTA A FRANCISCO IZQUIERDO DESDE PARÍS / Ever Arrascue Arévalo



CARTA A FRANCISCO IZQUIERDO DESDE PARÍS

Por: Ever Arrascue Arévalo

Maestro FRANCISCO "PANCHITO" IZQUIERDO LÓPEZ

El artista plástico y poeta Francisco Izquierdo López, hijo del gran escritor Francisco Izquierdo Ríos, nació el 19 de noviembre de 1938 en Amazonas y falleció en Lima el 5 de diciembre del 2007, con tal motivo nuestro paisano artista sangregoriano – sanmiguelino Ever Arrascue, a través de la presente carta y fina prosa poética, así lo recuerda:

 Panchito Izquerdo (primerode la derecha) departiendo en Encuentro de Escritores Ancashinos, en Huarmey. Foto Pis@diablo

Mi estimado Pancho, te escribo desde Paris, hoy domingo, medio día, estoy en la tumba de César Vallejo, donde he encontrado cartas y postales de todas partes del mundo, cómo no, de Santiago de Chuco, donde se dice: ‘’Querido Cholo, nos ponemos detrás de tu palabra’’… Con un temblor febril de emoción te escribo esta carta pensando en todos los amigos como un signo de caminar hacia nuestra autenticidad.

Estoy sintiendo una violenta carga de energía, la que quiero expresarla de esta manera:

En un taller de la ENBA, a escondidas con un grupo de muchachos por los años 80, inquietos por aprender arte, me acuerdo que nos diste una clase de pintura. Apareciste con tu camisa blanca, manga larga engrasada de dibujos de personajes de la carretera central: Ceres, Vitarte, de hombres con camisas de doble bolsillo en el pecho que salían de las fábricas a merendar, llevabas en los manchados bolsillos diferentes lápices y carboncillos para plasmar con el alma a las mujeres que corrían con su bolsa a tomar el micro, tomando a sus niños de la mano. Apenas unos mechones blancos en tu cabello, como las humanas canas de tu madre a quien querías profundamente. Tu desesperación por enseñar era grande, sin mezquindades; esa actividad que nos llevan muchas veces al fracaso económico, pero jamás al fracaso espiritual.

¡No!, así no, como un panal de abejas no, tampoco como un tablero de ajedrez, ¡así no es la pintura! La pintura es variedad dentro de la unidad y todo esto al servicio del tema. ¿Qué es la pintura? Es un dibujo, color, composición, distribución de elementos, ritmo, variedad, unidad, concepción, psicología, profundidad, tema.

Después de ver los cuadros y dibujos nos decías: Nos vemos el jueves a las 4 de la tarde; te esperábamos y nunca llegaste, pero la lección quedó impregnada en las paredes del taller que quedaba frente a la pérgola del tercer patio. Hablamos de los ‘’Fusilamientos del 3 de Mayo’’ de Goya, de la ‘’Ronda Nocturna’’ de Rembrandt, de la ‘’Rendición de Breda’’ o las ‘’Lanzas’’, de Velásquez.

Ahora entiendo tu desesperación, te quejas de tu sordera, sin embrago Goya y Beethoven fueron sordos; ¿Acaso no te acuerdas de la Quinta del Sordo? Renoir tuvo artritis y nunca renunció, pintó con los pinceles atados a los dedos y así continuó su trabajo; también Víctor Humareda perdió la voz y pintó en la Parada como un cóndor solitario hasta un día antes de su muerte. Acuérdate Pancho de la oreja de Van Gogh, las cartas a Theo.

Mi querido Pancho, a pesar que no llegaste ese jueves, aún te esperamos, así te queremos, porque nos dijiste: ‘’La calle es la mejor escuela’’; así también nos dijo Félix. De qué te puedes quejar, si tienes amigos que te quieren y valoran tu trabajo.
Leningrado, Paris y el Moulin Rouge fueron centros importantes para Europa. Para nosotros está el Jirón Azángaro, el Parque y la Casona de San Marcos, los mimos y los tragafuegos, los acróbatas con sus hijos, los músicos, los poetas; a veces para ti una gitana con sus manos largas y sus trajes multicolores, pero más aún el vendedor de golosinas en la puerta del Palermo o del Chino Chino.

Hace años me acuerdo que le escribiste a Sonia: ‘’Que tus hijos no sean una carga para no hacer arte, al hombro tus hijos y a pintar mucho, hay miserables que nos quieren ver sin obra. Pero sé que lo harás bien’’ ¡De no olvidar esa lección…!

Como naciste en el campo, Amazonas, al igual de los que te rodean, es lógico que la vida del campesino y la del obrero se convierta en tu tema fundamental, indiferente a las incomodidades. Por eso, me haces recordar a Gauguin quien abandonó toda la trivialidad parisina para internarse con gran emoción en Tahití y al final de su vida dijo: ‘’A los de la bodega, al gobernador o al alcalde quien me mandó a encarcelar por reclamar justicia para unos nativos les debo muy poco, pero los pintores que vienen detrás de mí me deben mucho’’. También Van Gohg se marchó con su maleta de colores y apenas un sombrero a Arlés, Tarascón y Auvers a pintar no con los colores de la naturaleza, sino con los colores de su paleta, de su corazón.

Así es, Pancho. Como esas noches azules y grises del mar, escuchando Huayno del sur del país, en esos micros como góndolas te marchaste a Chaclacayo, al lado del río Rímac, lejos del Sena, donde con guitarra y charango recordabas a Javier, Jorge Acuña y a Toño, tus amigos paternos de siempre, diciéndonos: ‘’El arte obedece exclusivamente a la libertad’’, y te acordabas de los ‘’Picapedreros’’ de Courbet y de su frase: ‘’Pintaré un ángel cuando lo vea’’, escrito con carboncillo en la pared de San Joaquín.

En estos momentos como no voy a recordar tu taller con un caballete sencillo, sin pretensiones, con muchos libros y dibujos, acuarelados algunos, alrededor de tu banqueta roja, y en todo el taller frases de los grandes como la de Tolstoy: ‘’Pinta tu aldea y serás universal’’. Con mucho calor, allí está el arte y el entusiasmo de ser pintor a pesar de las vicisitudes de la vida.

También recuerdo cuando hicimos una exposición en el Palermo, la última, antes que cierren; y con un trago conversamos… Al diablo con las propuestas intelectualistas, de lo que tú siempre nos hablas, nuevas formas, o no formas de arte, ‘’novedades pictóricas’’ (Instalaciones, etc.) lo cual no nos interesó nunca.
Nuestro ambiente es el fermento cultural, ¿cómo vamos a volver atrás, si lo bello está en la época en que estamos viviendo? Además, los vientos soplan a favor del nuevo arte y de una nueva humanidad.

Así es, maestro Izquierdo, pintamos porque nos preocupa y nos interesa la verdad. Nuestro horizonte es severo.

Al no quebrantar tu firmeza campesina ni tu perseverancia por realzar a un nivel pictórico los temas sencillos y cotidianos de la vida, donde también pones poesía, nos das ánimo para seguir con la tarea que hemos emprendido, con el camino ya trazado: dominar la corriente realista, porque la historia y la vida misma nos presiona a dominarla con convicción y sin prejuicios. Nuestro vigor deber ser inagotable.

Para mí, no se le puede llamar a un artista pintor peruano solamente porque ha nacido en el Perú, menos aún si no ha pintado al Perú. No tengo interés en los engaños ópticos que puedan jugar el color, tampoco el misticismo ni la gloria del representar fielmente lo que me conmueve: Las praderas verdes, las flores, los ríos, el trigo, la gente que están germinando entre nosotros y en cada pintura, lo expreso como lo siento así, sin derrota, con una esperanza vigorosa abierta al espectador.

Pancho, ¿Acaso no es hermosa la vida del cuadro “’Retamita’’ de Bruno? Una niña vestida de bayeta acarminada, con florecitas a su alrededor y un rebaño blanco entre grises y verdes cerros, bajo su cielo ultramar: Eso es lo que llena mi corazón en estos momentos, al colocar en nombre de todos una rosa en la tumba de nuestro gran César Vallejo.

Si alguien nos llama “pintores aldeanos’’ o costumbristas, es mejor y estamos orgullosos de serlo porque es mucho más significativo pintar un campesino, un pescador, un obrero o una madre con sus hijos; porque esa es la esencia moral y social de la humanidad; además creo que el arte es grande cuando nace de una necesidad humana.

El sol, aquí después de mediodía, colma de luz, la tumba, haciéndome recordar la iluminación de los maduros trigales de Santiago de Chuco, de Huancas, de San Gregorio y del todo el Perú. También estoy pensando en Gabriel, en Tania y le digo: ‘’En una mañana azul como esta, con pedacitos de geranio, me gustaría adornar tu vestidito amarillo, recoger tu sueño como todos los días y regalarte una docena de colores para que pintes frescos paisajes con sus laboriosos campesinos’’. Estoy sintiendo la ausencia de mi padre cuando allí, donde los algarrobos al sol lloran miel y portentosos labriegos abren caminos con sus talones, me decía: ‘’Estrecha la mano al forastero’’.

A mí me interesa pintar los ómnibus que llevan y traen gente a la ciudad y también a un campesino que llora a su hijo cuando lo ve partir a la capital, y al hijo que llora su música, a su madre, a su tierra… Así pues, mi querido paisano, mis esperanzas son inquebrantables y mi amor por la vida es imponente.

Volviendo la vista hacia el descanso de César Vallejo, agradeciéndote por tus lecciones de arte, con el canto de ‘’El Hombre’’ de Ranulfo, te diré: El arte es para mí como sentir la mano de mi madre en mi mano que dibuja y escribe el latido y la fuerza de las manos buenas, y lo hago con amor a la mano que causa este sentir.

Ojalá podamos hacer realidad aquella muestra que tanto anhelas, el homenaje a Mario Urteaga y decir: ¡Viva el amor a la tierra y a sus humildes trabajadores!

Cuando llegué a Paris me dijeron: ¿A dónde quieres ir a tomarte una fotografía? ¿Al Arco del Triunfo, a la Torre Eiffel o al Puente del Alma, donde murió Diana? Yo les dije: Quiero ir a la tumba de César Vallejo, al Montparnasse, a dejarle una rosa. De allí nació esta carta.

Paris, octubre de 1999

Ever.

* Las fotografías del Maestro Francisco Izquierdo López, corresponden a inauguración pictórica de Encuentro de Escritores de Ancash, en Huarmey – Ancash. Fotosarte Pis@diablo.

No comments: