Sunday, June 10, 2018

Reaparece y presentan libro: EL VIEJO PUEBLO SAN MIGUEL DE CATAMUCHE de Josè Rodrìguez Villa / Daniel Sàenz More


Publicaciones

EL VIEJO PUEBLO SAN MIGUEL DE CATAMUCHE

Cultural Pis@diablo.- Hemos recibido con inmensa alegría y beneplácito de manos de su autor la edición final del libro Una hisoria olvidada; EL viejo pueblo 'San Miguel de Catamuche', (octubre, 2016, 116 pp.) del distinguido investigador José Rodríguez Villa, por la Universidad Nacional de Cajamarca, presentado el último miércoles 6 de junio en auditorio Facultad de Ciencias Sociales UNC.

Importante aporte a la historia sanmiguelina que en su edición primigenia fue presentada en San Miguel en uno de nuestros encuentros organizados por APESAM. felicitamos y agradecemos, sinceramente; esta obra será piedra angular para las que continuaràn. Nuevos estudios e investigaciones están pendientes.

He aquí el comentario del reconocido antropólogo cajamarquino Daniel Sáenz More:


En el Perú hubo pueblos que cambiaron su ubicación geográfica, como San Miguel de Piura, i otros que aparecieron i desaparecieron, como San Miguel de Catamuche, en Cajamarca. La acuciosa investigación del antropólogo José Rodríguez Villa en la sección colonial del Archivo Regional de Cajamarca lanza la hipótesis, a partir de dos manuscritos notariales, de que existió un emplazamiento próximo a la actual ciudad de San Miguel de Pallaques. Este pueblo también se llamó San Miguel i habría estado ubicado (aún por confirmar) en la zona de Catamuche, en la planicie ubicada al pie del cerro Gentil. Es más: habría sido fundado por Francisco Pizarro, en su marcha hacia el encuentro con Atahualpa en Caxamarca, el 10 de noviembre de 1532 i sería, por lo tanto, el segundo pueblo español fundado por los conquistadores españoles en el territorio que se llamaría Perú. Después de 40 años de su fundación, San Miguel de Catamuche (fundado en 1532) desapareció para dar origen al poblado de San Miguel de Pallaques (establecido en 1572), distante 10 kilómetros del poblado anterior, debido posiblemente a la política de reducciones de indios impuesta por el virrey Toledo.


Con rigor histórico, Rodríguez Villa se introduce heurísticamente en estos dos documentos coloniales para, después de un análisis paleográfico, estudiar los sorprendentes datos que nos presenta en el libro "Una historia olvidada: El Viejo pueblo 'San Miguel de Catamuche' en Cajamarca", editado i publicado por el Vicerrectorado de Investigación i Responsabilidad Social Universitaria de la Universidad Nacional de Cajamarca (octubre, 2016, 116 pp.) i presentado la mañana de este miércoles 6 de junio en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNC (desconocemos por qué la UNC tardó dos años en presentarlo). Los comentarios estuvieron a cargo de Evelio Gaytán Pajares, director del Archivo Regional de Cajamarca, i de Gilberto Araujo Barboza, decano de Ciencias Sociales de la UNC, entre otros.


El primer manuscrito notarial de 1601-1609 refiere una venta de tierras en Catamux por parte de los caciques locales (Supaicaca, Chuquichanchas, Chuquixaxa i Chumpi) a favor de Alonso Sánchez de Sotomayor, un propietario español residente en la villa de Caxamarca i dedicado a la ganadería en las tierras de Catamux, Gualanga i Amaxcisbon, recién adquiridas en este contrato "con contento i satisfacción de los naturales." 


El tenor del segundo manuscrito de 1632 es el remate de tierras en Catamuch, Yamax (posiblemente Lamaspampa), Succha i Chullumben ante las deudas acumuladas por los descendientes de Sánchez de Sotomayor. El beneficiario pasó a ser el español Bartolomé Villarreal. También existe la mención al reclamo de los caciques Tantachanchas, Quispe i Rupaicaca respecto de la apropiación de tierras "vacas i realengas" de una zona de Catamuch perteneciente a los indios. 


El análisis de estos documentos notariales se enriquece al contrastarse con las informaciones de las Visitas Coloniales de 1571-72 a las siete huarangas, 52 pachacas i 43 pueblos de Caxamarca. Estas visitas fueron el antecedente de los actuales censos o empadronamientos i eran realizadas por la administración colonial.


El libro de Rodríguez Villa es como la punta de un iceberg que invita a la confirmación arqueológica i a los necesarios estudios histórico, etnográfico i lingüístico para dilucidar más aspectos de nuestro pasado. Esa es la invitación del autor a sus lectores. Da gusto saber que este tipo de investigaciones se hacen en Cajamarca porque nos permiten conocer varios aspectos de nuestro pasado que se proyectan hasta nuestros días. Una lectura mui recomendable para todos los cajamarquinos i, en especial, para todos los sanmiguelinos. /dsm

Josè Rodrìguez Villa, autor del libro

No comments: