LLAPA Y EL CAMBIO CLIMÁTICO.
Llapa se abastece de un solo importante canal de irrigación, el resto fueron abandonados: El Convento y El Chicche.
No olvidemos que el distrito de Llapa (San Miguel-Cajamarca), tiene un suelo eminentemente fértil y la mayoría del año lo aplasta la sequía. Se abastece únicamente del canal de irrigación Chorro Blanco, de algunas quebradas y canales que emergen del regazo del majestuoso Cerro Negro y de las esporádicas lluvias que se generan de junio a diciembre.
Hay muchos sueños y proyectos factibles de irrigación, pero no hay acción visionaria de las autoridades municipales. Tenemos el proyecto de irrigación COLPACUCHO, que surgiría desde la bocatoma a la altura del centro poblado San Antonio de Ojos y que recorrería paralelamente por la parte baja de la principal carretera (El Empalme-Llapa) hasta el caserío de Lladén.
ABANDONARON LOS CANALES EL CONVENTO Y EL CHICCHE
Lamentablemente, en estos últimos años han abandonado el canal El Convento, que irrigaba gran parte del Cercado Alto y, peor aún, mataron al importante canal de irrigación EL CHICCHE que se desplazaba por la parte alta del caserío Guerreros hasta el mirador La Cruz (Vitián Alto). Testimonios de los pobladores, argumentan que un grupo de INESCRUPULOSOS LLAPINOS y los alcaldes de turno de San Miguel y Llapa, negociaron las fuentes de agua de este canal con Minera Sipán, propiedad del Grupo Hochschild de Chile, que explotó el cerro El Chicche desde inicios de 1996 hasta el 2000.
HA MEJORADO LA REFORESTACIÓN
En cuanto a la reforestación ha mejorado en éstos últimos 30 años, hay un hermoso paisaje en toda la campiña con la siembra de pinos y cipreses; pero poco bosque natural donde hace 60 ó 50 años, eran hábitat preferido de venados, zorros, zorrillos, hurones, guayhuacos, liebres, conejos, zorzales, torcazas, cotorras, santa rosas, búhos, gavilanes y águilas.
También, se nota el cambio climático y/o calentamiento global de la tierra, donde por sobre los 3,000 m. s. n. m. hace 50 años abundaba el ichu, el chinshango, el shinshil y el pushgay; ahora hay nutritivos pastos que abastecen a una pujante ganadería lechera. Ni hablar en Llapa, siempre ha sido tierra de los exquisitos chiuches o calabazas; ahora muy bien producen zapallos y otras semillas que se desarrollaban en zonas cálidas entre los 2,000 m. s. n. m. Nuestra tierra con el tiempo está cambiando, esperemos que su gente haga lo mismo a favor de nuestro distrito de Llapa.
Atentamente.
WALTER HERNÁNDEZ MALCA
Director Fundador y Periodístico Revista AMBITO.
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