Glorias del Fútbol Sanmiguelino:
BENIGNO MAYTA GÁLVEZ.
Promoción 1969 Colegio Nacional Mixto "San Miguel"
Foto Pis@diablo
BENIGNO MAYTA GÁLVEZ.
Promoción 1969 Colegio Nacional Mixto "San Miguel"
Foto Pis@diablo
Monday, October 05, 2015
DEMETRIO QUIROZ-MALCA en Feria del Libro de Nuevo Chimbote (Ancash) 2015
"El Siglo de Oro de la Poesía Cajamarquina en la poética de DEMETRIO QUIROZ-MALCA" y "Una voz en el camino: poesía reunida" del mismo autor, ediciones Municipalidad Provincial de San Miguel (Cajamarca), a cargo de Miguel Arribasplata y Víctor Hugo Alvítez, respectivamente, en la Feria del Libro de Nuevo Chimbote 2015.
Friday, October 02, 2015
ESMERALDINO RESPLANDOR / Ever Arrascue. Óleos. San Miguel- Cajamarca
ESMERALDINO RESPLANDOR / Ever Arrascue
Pinacoteca Municipal Provincial de San Miguel - Cajamarca.
Homenaje Fiesta patronal Arcángel San Miguel y 51° Aniversario de creación política provincia San Miguel.
Del 27 de setiembre al 09 de octubre 2015.
San Gregorio Querido
LA FIESTA DE MI PUEBLO / Daniel Cubas Romero
Daniel
Cubas Romero
LA FIESTA DE MI PUEBLO
Mes de septiembre donde los días se tiñen de color y alegría. Paseante va por sus calles una fe encendida, que en cada esquina acordes musicales matinales suelen abrazar al visitante. El retorno al pueblo querido donde tantas primaveras han pasado, la higuera dio sus frutos y el ave fue anidando en todas las ramas del eucalipto de la chacra de la abuela Carmen. He regresado para reencontrarme con los amigos de antaño, a recoger el hervor de las risotadas adolescentes en medio del patio del Colegio San Miguel. He caminado con el recuerdo de tantas noches de serenatas, he pasado por tu calle por debajo de tu balcón en los claros de luna de romance. Regreso entusiasmado a la antigua casa de mi niñez, desempolvando las sillas de madera alrededor de una mesa extensa, que hoy fue adornada con manteles de hilo, por las virtuosas manos de mi anciana madre, tan bella en sus palabras color orquídea. Verla sonreír al estar rodeada de sus hijos grandes, es una ternura de Dios que nos regala en el palpitar de todos los días. Me he acercado al Arcángel San Miguel, besando mis rodillas con las manos levantadas en mis rezos, implorando, que no desaparezcan las costumbres de mi pueblo. Que las casas se mantengan con sus balcones de geranios, con paredes gruesas de abobe y llegar a encontrar a los escondidos biombos de tela que adornaban la entrada de tantos hogares. Mes de septiembre donde los días se tiñen de color, unas lágrimas tiemblan en mi rostro porque cada día quiero más a mi tierra y la distancia que me tocó vivir, acostumbro transitar por el patio de mis sueños convirtiéndome en un mishquichador luego de hacer hervir tantas veces el hueso de res regalado. Me siento correr descalzo como un moltoncito por la banda, por el puente de Calicanto hasta llegar a mojar los pies repletos de travesuras en el río Puclush venido de las alturas. Yanga le he dicho a la neblina porque sé que saldrá el sol y me bañaré de tanta belleza acumulada en los horizontes, de los sembradíos amplios de arveja y los verdes extensiosos maizales.
Foto@rte Pisadiablo
LA FIESTA DE MI PUEBLO II / Daniel Cubas Romero
Daniel
Cubas Romero
LA FIESTA DE MI PUEBLO
II
Una ventisca se acerca a los geranios púrpura de tu balcón, trayendo consigo los aromas del trigal. En el atardecer de mi vida he encontrado en la fiesta de mi pueblo tantos abrazos, miradas alegres de familiares de amigos que se han desempolvado del zaguán de los recuerdos, desplazándose a la par de mis pasos rodeando la Plaza de Armas con sus encantos. La alegría se pasea por mi alma en cada callecita que me detengo a contemplar, aquellos días dormidos que ahora los he despertado con mi presencia. Se han hundido mis palabras respirando el bullicio de aquellos años cuando jugábamos con las sogas de cabuya, los crines salvajes, los amarres de los equinos, nuestros nombres grabados en las paredes anchas de adobe, para luego correr asustados por el maizal, ante la presencia del Cura Diego. He podido descubrir uno de ellos encerrado en un corazón de los trece años y mis palpitaciones se han visto envueltas de una emoción tan similar al nerviosismo de avecilla capturada. He vuelto los ojos a una adolescencia mágica, edades misericordiosas, donde las tardes abrazaban a las nubes y estas se escondían por el terrado, cuando La Nieves se alisaba el cabello para hacerse sus trenzas largas. La fiesta de mi Pueblo es grande y dura varios días. Me he asomado a la puerta de mi ánimo y de pronto te he visto por la vereda de al frente, de la mano de un señor que no creció con nosotros, unos hijos grandes cargando unos nietos que pudieron ser nuestros. Te he contemplado sin que te des cuenta. En las comisuras de tus labios sé que aún existen unos fresales que ocultan los besos que te di. A lo lejos una banda de músicos invitaba a bailar, he corrido con mis huesos ajenos desaforadamente y he danzado hasta que cante el gallo de la sorda Juana y otro le conteste.
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