JESÚS NAZARENO CAUTIVO Y EL FERVOR RELIGIOSO
*Cada año acuden mayor cantidad de fieles llapinos provenientes del interior del Perú y de diversos países del mundo.
*El estado de emergencia sanitario se ha extendido por 180 días hasta la primera semana de marzo del 2022, donde se prohíbe las fiestas patronales.
En la mente de todo llapino siempre está latente, todos los años de visitar su tierra, o los que radican allí cada vez que se acerca la fiesta patronal, esperan con entusiasmo la celebración de su feria; porque es una fecha especial para dimensionarlo al pueblo abarrotado de visitantes; quienes algunos después de muchos años se reencuentran con las calles abalconadas, con los contemporáneos, con el aroma natural que expande la flora y aire imperecederos, con los rincones penumbrosos donde la bohemia los endiosaba, con los recuerdos, donde a la larga pasaron los mejores momentos de la vida, con los jirones donde pasada la media noche bullían inspiradas serenatas a las mujeres más hermosas, con la recapitulación de las travesuras propias de un niño y adolescente y –ante todo- con el recuento y vivencias religiosas que alimentaban cada año la fervorosa feria en homenaje al patrono del pueblo “JESÚS NAZARENO CAUTIVO”.
HISTORIA DE LA IMAGEN
La tradición llapina de venerar a Jesús Nazareno Cautivo se pierde en el tiempo; todavía es una interrogante por descifrar la fecha y año exacto de su procedencia y quién o quiénes fueron los responsables de su traslado al pueblo.
Sobre esta incógnita hay mucha historia por escarbar, pero se tejen algunas hipótesis, entre ellas, que en 1547 apareció un cajón con un santo en las caletas Santa Rosa y Pimentel, actual Monsefú (Lambayeque), traído posiblemente de España, sin destino fijo.
Circunstancia que el sacerdote Juan Fernández lo “adoptó” con el nombre de Jesús de Nazareth o Jesús Nazareno y lo trasladó a la modesta iglesia de Monsefú (actual mercado de abastos). Un año después, a partir del 14 de setiembre de 1548 se convierte en el patrono de este pueblo de pescadores.
“CAUTIVO”
Un día los feligreses se percatan que el santo no estaba en su pedestal, había desaparecido, al buscar lo encuentran cerca del pueblo y devuelto a su lugar; creíble o no, al poco tiempo volvió a esfumarse, lo ubican y lo regresan al templo. Para que el santo no se “escape” lo colocan en una recámara especial con las manos encadenadas. Desde entonces es conocido como Jesús Nazareno Cautivo de Monsefú.
Finalmente, la distancia entre la costa lambayecana a San Miguel de Pallaques y a Llapa es corta, es posible que la tradición del venerado santo sea el mismo origen y se haya extendido su culto más allá de sus dominios originales monsefuanos.
SABREMOS CUÁNDO LLEGÓ A LLAPA
Obviamente, estamos investigando, en que fecha llegó a Llapa, la imagen Jesús Nazareno Cautivo y pronto tendremos datos fehacientes sobre este acontecimiento religioso. Además, invocamos a los llapinos nos hagan llegar datos sobre este tema para afianzar la historia de esta imagen milagrosa y -respetablemente también castigadora- que por más de 139 años protege a la bendita tierra de Llapa y a sus hijos repartidos por todos los horizontes del mundo.
Entonces, el reto está en marcha; sin embargo, es necesario incluir lo que describió el extinto intelectual y amigo cruceño Dr. Carlos Burga Larrea, en el “Diccionario Geográfico e Histórico de Cajamarca” editado en 1983, indicando que la ciudad de Llapa le tiene devoción a San Andrés, (que actualmente ya no se celebra) cuya fecha es el 30 de noviembre de cada año, cuya bella imagen fue adquirida en 1875, siendo su primer pastor, el llapino presbítero José María Balcázar.
Luego, en ese tiempo, es decir, el 09 de enero de 1887 se creó la parroquia de Llapa por gestiones del Gobernador llapino Tiburcio Barrantes Salazar (Jefe de la “Columna de Llapa” que combatió en la Batalla de San Pablo el 13 de julio de 1,882) y se disgrega de la parroquia de San Pablo, según documentos de la Diócesis de la Curia trujillana.
En conclusión, parece que de esta fecha (después que los chilenos fueron abatidos en San Pablo en la Guerra del Pacífico) para adelante se inicia la celebración de la imagen Jesús Nazareno Cautivo, que tiene su día cumbre el 28 de agosto y que hasta el momento ha calado no solamente en el corazón de los llapinos sino que ha trasuntado su bendición y milagros fuera de las fronteras de Llapa.
Atentamente.
WALTER HERNÁNDEZ MALCA
Director Fundador y Periodístico
Revista AMBITO.
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