TEMORES
Tercetos con serventesio
Tercetos con serventesio
Mis años son escasos todavía,
escucho las arengas y respiro:
te vas a linda Lima pronto día.
Viajar en el camión de don Espiro,
es orden que me pinta de colores,
en tanto pasan horas y suspiro.
Hay bultos, hay maletas y temores,
me brindan un lugar en la caseta,
el mixto no soporta más actores.
Entonces la partida se concreta,
cruzar El Pabellón es fácil hecho,
y luego por Chuad la fe me reta.
Del Túnel al Balcón se va derecho,
hay soles en Pencayo de mañana,
la gente de Payac es de provecho.
Comienza la subida provinciana,
mi miedo crece más en el Mal Paso,
hay cruces de la muerte palangana.
Estar en Los Pilares es un caso,
más cruces en abismos insondables:
arreglen los caminos sin retraso!
De Lives las bajadas deplorables,
asustan por infausta carretera,
y cuántos epitafios con culpables.
Llegar a Platanar tras vil espera,
es logro que me deja bien librado,
pasando de Quindén a Tembladera.
Camina mi camión más apurado,
se goza con llegar a La Cuchilla,
en épico Chepén ya prosperado.
La noche llega ya, el sol no brilla,
es tiempo de viajar en Norandino,
después de la descrita pesadilla,
la Lima proverbial es mi destino.
© Tito Pérez 2017.
Foto: El Túnel, crédito desconocido.
escucho las arengas y respiro:
te vas a linda Lima pronto día.
Viajar en el camión de don Espiro,
es orden que me pinta de colores,
en tanto pasan horas y suspiro.
Hay bultos, hay maletas y temores,
me brindan un lugar en la caseta,
el mixto no soporta más actores.
Entonces la partida se concreta,
cruzar El Pabellón es fácil hecho,
y luego por Chuad la fe me reta.
Del Túnel al Balcón se va derecho,
hay soles en Pencayo de mañana,
la gente de Payac es de provecho.
Comienza la subida provinciana,
mi miedo crece más en el Mal Paso,
hay cruces de la muerte palangana.
Estar en Los Pilares es un caso,
más cruces en abismos insondables:
arreglen los caminos sin retraso!
De Lives las bajadas deplorables,
asustan por infausta carretera,
y cuántos epitafios con culpables.
Llegar a Platanar tras vil espera,
es logro que me deja bien librado,
pasando de Quindén a Tembladera.
Camina mi camión más apurado,
se goza con llegar a La Cuchilla,
en épico Chepén ya prosperado.
La noche llega ya, el sol no brilla,
es tiempo de viajar en Norandino,
después de la descrita pesadilla,
la Lima proverbial es mi destino.
© Tito Pérez 2017.
Foto: El Túnel, crédito desconocido.
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